lunes, 27 de diciembre de 2010

2do día - Delhi

Visibilidad en Delhi: 50 metros. No, no hay niebla, hay smog, mucho. Pero aún así salí  decidido a empezar a ver un poco más de la ciudad. Caminé primero al Connaught Place, el centro colonial de la ciudad, herencia de los británicos, no hay mucho para ver, es más comercial que otra cosa y acá te empezás a dar cuenta la fuerza de la cultura india(hago la aclaración acá y para el resto del viaje, Indio es la nacional de la India, Hindú es el que profesa el hinduismo), si bien los británicos se asentaron acá y dominaron por varias décadas, no pudieron sobreponerse a lo indómito de los locales, que en pleno siglo XXI mean y cagan en la calle, entre las vacas (y no andan nada más las vacas que son “sagradas” por la calle, en mi lista de animales rurales he marcado unos bueyes, ovejas y cabras) y los turistas, fue divertida la parajoda de ver a un policia haciendo pis contra un paredón en el medio de una avenida, aunque esta zona está mucho más occidentalizada.
De ahí fui para la Puerta de India, una suerte de arco del triunfo donde paseaban familias, se sacaban fotos y jugaban al cricket (TODO el mundo parece ser fanático de esto acá, es el primer lugar donde voy que después de decir Argentina no te dicen “Maradona, Maradona”…Mejor, no lo deben conocer al Gordo).
El Purana Qila es un fuerte, bastante deteriorado, pero muy grande,  contruido por un emperador afgano allá por 1500. No había nadie en la entrada así que me ahorré las 100 rupias y adentro, te podias subir al fuerte, hacer cualquier cosa, porque nadie cuidaba ni controlaba, salvo el okupa que tenía su choza hecha al fondo, pero o no sabía inglés o me vío cara de que no le iba a dar nada, porque se me paró lado pero no dijo nada.
Tratando de encontrar una mezquita en Nizzamudin, el barrio árabe, un tipo me mandó al centro del barrio por medio se un par de señas que o no entendi o el muy pillo se hizo el gracioso, donde no había ningún turista, es cierto que la gente miraba raro mientras paseaba por los callejones angostos, entre las pashminas y los barbudos que jodian que al bazaar no se podía entrar con zapatos, que había que dejarlos afuera y pagar, mientras todos los de ahí pasaban calzados como si nada, asi que lección de Delhi, si te dicen que hagas algo que los locales no hacen, no lo hagas, es un timo para sacarte plata. Pero fue, creo la experiencia más auténtica, ver la Delhi que los turistas no ven y también la de entrar a la tumba de Khan i Khanan diciendo que eramos musulmanes (acá ayudó Toni que chapuceaba algo de árebe, aprendido en alguno de sus viajes por Medio Oriente).
Entre una vuelta y la otra llegué al frente de la tumba de Humayun, patrimonio Mundial de la Humanidad y según algunos el sitio más lindo de Delhi, que en estilo Murghal se parece al Taj Mahal, pero en arenisca roja y con menos detalles, pero también en mármol blanco, acá sea el lugar que sea, hay basura, si bien este lugar estaba cuidado (sino la Unesco lo nombra patrimonio en riegos y de ahí despúes te desacreditan y en vez de cobrar 250 rupias la entrada las tenés que cobrar 150).De ahí hasta la tumba de Safdarjang caminé casi 1 hora que se pasó rápido, mientras veía como unos chicos de la calle trataban de cazar un mono, tirándole pieras y gomerazos y una carrera de obstáculos de discapacitados que tenían que llevar una cuchara con un huevo en la boca. Delhi es así, una sopresa en cada esquina, un paraiso para el “people spotting”.
Llegué muerto al hotel nuevo, y me afronté a la tarea hercúlea número 2 del viaje. Ducharse con agua caliente: Todas las habitaciones en Delhi tiene 2 o 3 llaves afuera, una es para la luz, otra para el agua caliente y otra para el aire acondicionado. Después de probar con las dos canillas, dejarlas un rato volver a probar, decidí bajar a reclamar mi legítimo derecho y hacer valer mi derecho como consumidor de tener agua caliente (no se rian que no es en joda, tuve que pagar 50 rupias por día extra por el agua y la verdad está frio para ratonarse por 5 pesos) y mientras bajaba ví que en una de las habitaciones, arriba de las llaves de afuera una decía “light - hot - AC” asi que volví y pude tener agua caliente, por los 2 minutos que me llevó lavarme el pelo, el resto fria.
Las fotos pronto, cuando consiga una conexión de internet medianamente decente.

1 comentario:

  1. que genial Migue coo siempre esas descripciones son fantàsticas !. ojalà sigas disfrutando ! saludos ! vick.

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